Madrid, 20 de marzo de 1936, – Madrid, 19 de agosto de 2015
Lina Morgan, cuyo nombre real era María de los Ángeles López Segovia, fue una de las figuras más emblemáticas del espectáculo español. Vedette y actriz, destacó por su inigualable talento para la comedia y su capacidad de conectar con el público en todos los medios en los que trabajó: teatro, cine, televisión y musicales. Su carrera estuvo marcada por su estilo único, su vis cómica y su capacidad de emocionar y hacer reír a generaciones de espectadores.
UNA CARRERA BRILLANTE EN TODOS LOS ESCENARIOS
Lina Morgan debutó en el teatro como vedette, y su versatilidad y carisma pronto la convirtieron en una de las estrellas más queridas de la escena española. Su éxito en la comedia musical la llevó a protagonizar obras que se convirtieron en clásicos del teatro, como ¡Vaya par de gemelas!, Sí al amor, El último tranvía o Celeste… no es un color, obras que batieron récords de taquilla y dejaron un legado imborrable en el teatro cómico.
En el cine, su gracia y personalidad única brillaron en películas como Los subdesarrollados, Soltera y madre en la vida y la icónica La tonta del bote, que permanece como una de las películas más recordadas del cine español de la época.
Lina también triunfó en la televisión, donde protagonizó series de enorme éxito como Compuesta y sin novio, Hostal Royal Manzanares y Academia de baile Gloria, consolidándose como una figura imprescindible del entretenimiento en España.
RECONOCIMIENTOS Y PREMIOS
La calidad de su trabajo y su enorme popularidad le valieron numerosos galardones, entre ellos:
- Fotogramas de Plata, que reconocieron su talento como actriz de comedia.
- Tres TP de Oro, otorgados por el público que la adoraba.
- Premio Ondas, un prestigioso galardón en el mundo de la comunicación y el espectáculo.
- Medalla de Oro al Mérito en el Trabajo, que reconocía su dedicación y contribución al mundo artístico.
- Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes, por su aportación a la cultura española.
SU VINCULACIÓN CON LAS NAVAS DEL MARQUÉS
Lina Morgan tenía raíces muy especiales en Las Navas del Marqués. Su madre, Julia Segovia, era natural de esta localidad, y la actriz pasó muchos veranos en el pueblo, alojándose cerca de la actual plaza de la Villa. Su vínculo con Las Navas no se limitó a sus estancias estivales, sino que también manifestó su devoción por el Cristo de Gracia, llevando siempre consigo una medalla en honor a esta imagen religiosa.
En 1989, en reconocimiento a su trayectoria y su cariño por el municipio, Lina Morgan fue nombrada Hija Adoptiva de Las Navas del Marqués, un honor que subrayaba la conexión emocional que mantuvo con este lugar a lo largo de su vida.
UN LEGADO QUE PERDURA
Lina Morgan dejó un legado imborrable en el panorama artístico español. Su humor blanco, su estilo cercano y su extraordinaria capacidad para emocionar han convertido su carrera en un referente de la cultura popular española. Fue una mujer adelantada a su tiempo, pionera en su género y un ejemplo de esfuerzo, humildad y talento.
Lina Morgan sigue siendo recordada no solo como una gran actriz, sino también como una persona generosa y cercana, cuyo impacto en el mundo del espectáculo y en los corazones de su público permanece vivo.
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